- 29 enero 2020
- Posted by: José
- Category: Padres de familia
Para la mayoría de las personas es sencillo tener una conversación. No pensamos en que tenemos que hacer comentarios adecuados o en cómo unirnos a la conversación cuando otras personas están hablando. No obstante, el flujo normal de una conversación puede ser complicado para los chicos que tienen dificultades con sus habilidades sociales.
Habilidades importantes como leer el lenguaje corporal y saber qué decir (y cuándo decirlo), no les resultan fáciles. A continuación se presenta un resumen de las 4 partes de una conversación, las habilidades involucradas y cómo ayudar a su hijo a manejar cada una de esas partes.
- Unirse a una conversación
Las conversaciones en grupo son complicadas porque hay que comunicarse con más de una persona. Cada persona tiene una personalidad y un estilo de comunicación particular. El grupo en sí mismo tiene una manera única de funcionar que está basada en quién participa y qué se está discutiendo.
Habilidades involucradas:
- Leer el lenguaje corporal del grupo para saber si es apropiado unirse
- Usar las frases adecuadas para ser incluido
- Entender el tono de vozque las personas usan cuando no quieren que se una a la conversación
- Saber qué se está comentando y no salirse del tema
Por qué podría ser difícil: Tener dificultad pare leer el lenguaje corporal puede evitar que los chicos se den cuenta si una conversación es privada o abierta. También pueden malinterpretar el ritmo de la conversación. ¿La pausa al hablar es un descanso natural? o ¿es que la persona se detuvo para respirar? Además, algunos chicos no captan que para participar en una conversación necesitan hablar del tema que se está tratando.
Cómo ayudar:
- Utilice videos, programas de televisióno eventos de la vida real que destaquen situaciones donde un grupo se aparta o habla en privado. También señale cuando las personas en la conversación están mirando alrededor y parecen dispuestas a que otras personas se unan.
- Muéstrele a su hijo cómo esperar una pausa en el fluir de la conversación y que entonces haga una pregunta como: “¿está bien si me uno a ustedes?”.
- Recuerde a su hijo que ponga atención y diga algo relacionado con lo que están diciendo los hablantes. Su hijo puede usar preguntas del tipo “quién”, “qué”, “cuándo”, “dónde” y “por qué” para ponerse al tanto.
- Iniciar una conversación
Comenzar una conversación involucra una serie de pasos, y para tener éxito hay que hacerlos correctamente. El primer paso es a menudo el más complicado: determinar si es el momento adecuado para entablar una conversación.
Habilidades involucradas:
- Saber iniciarla con un saludo y tener el lenguaje para hacerlo
- Reconocer si es el momento adecuado para tener una conversación
- Seleccionar un tema adecuado y contar con frases para comenzar el diálogo
- Reconocer las pistas no verbalesque indican si la otra persona está interesada y desea conversar
Por qué podría ser difícil: Los chicos que son impulsivos pueden irrumpir en la conversación sin saludar. Actúan como si la otra persona supiera lo que están pensando. Algunos chicos pueden que no sean capaces de percibir cuál es el “ambiente” en la habitación y así saber si es un buen momento para empezar una conversación. Y una vez que comienzan, puede que no capten las señales de que la persona no está interesada en hablar.
Cómo ayudar:
- Enseñe frases básicas para saludar a personas conocidas (“hola, ¿cómo estás?”) y a personas que no conoce (“hola, soy José, el vecino de Miranda”).
- Muestre a su hijo cómo es el lenguaje corporal cuando la persona desea hablar y cuando no lo desea. También muéstrele ejemplos de un incómodo que pudiera significar falta de interés.
- Mantener una conversación
El trabajo no termina cuando los chicos con habilidades sociales limitadas participan en una conversación. También puede ser difícil continuar una conversación. Requiere seguir una serie de reglas sociales, y no solo durante un minuto o dos.
Habilidades involucradas:
- Saber cómo tomar turnos en una conversación
- Escuchar lo que la otra persona dice y responder adecuadamente
- Ser capaz de no salirse del tema
- Leer el lenguaje corporal, las expresiones faciales y otras pistas no verbales
Por qué podría ser difícil:
La impulsividad puede provocar que los chicos interrumpan cuando están emocionados con un tema. Tener dificultad para interpretar las pistas no verbales puede evitar que se den cuenta de que la otra persona está intentando hablar o ha perdido el interés. Además, los chicos podrían perder la idea que no puedan dejar de pensar.
Cómo ayudar:
- Enseñe a su hijo cómo hacer preguntas que demuestren que ha escuchado y que está interesado en lo que la otra persona está diciendo. Ofrézcale ejemplos para practicar y usar.
- Ayude a su hijo a practicar cómo se mantiene una idea en la cabeza en lugar de decirla abruptamente. Hágale saber que está bien decir: “recuérdame que quiero decir algo acerca de eso cuando termines”, en caso de que tema olvidar ese punto.
- Idee palabras o frases que él pueda usar para demostrar que está poniendo atención durante la conversación, como “correcto” o “qué bueno”. Explíquele que necesita combinarlas porque repetir lo mismo puede sonar como que no está poniendo atención.
- Representen rolespara demostrar que decir algo fuera de lugar o en el momento inadecuado puede sonar como que no está interesado en lo que otra persona está diciendo.
- Finalizar una conversación
Finalizar una conversación puede ser tan difícil como iniciarla. Es necesario interpretar la situación correctamente para saber si es el momento apropiado para terminarla. Y luego, debe tener las palabras para concluirla apropiadamente.
Habilidades involucradas:
- Leer el lenguaje corporal, las expresiones faciales y otras pistas no verbales
- Entender el tono de voz y otras pistas verbales
- Estar consciente de cómo son percibidas sus propias pistas verbales y no verbales por los otros (tomar en cuenta el punto de vista de los demás)
- Transmitir la intención a través del lenguaje (por ejemplo: “bueno, ya me tengo que ir”)
Por qué podría ser difícil: Dado que muchos chicos con dificultades para socializar tienen problemas para leer el lenguaje corporal, pueden que no reconozcan que una persona ya no está interesada o que necesita darle fin a la conversación. Los chicos que son impulsivos o que tienen problemas con las habilidades sociales puede que concluyan una conversación abruptamente sin decir “adiós” y se alejen del lugar o cuelguen el teléfono.
Cómo ayudar:
- Demuestre algunas de las pistas no verbales que su hijo podría observar cuando alguien está intentando terminar una conversación, como mirar el reloj, voltearse o bostezar.
- Enseñe a su hijo algunas de las pistas verbales que indican que alguien está intentando terminar una conversación, como no responder las preguntas, decir que tiene que irse o usar palabras como “entonces…” o “bueno…”
- Explíquele que él también puede usar esas pistas para concluir una conversación.
- Enseñe a su hijo frases que puede usar para saber si ha terminado la conversación. Un ejemplo sería: “¿podemos continuar la conversación o te tienes que ir?”.
- Ayude a su hijo a aprender y practicar cómo terminar usando una oración como: “fue bueno hablar contigo” o “bueno, ya tengo que irme” antes de irse.
Para los chicos que tienen dificultades con las habilidades sociales, aprender el arte de la conversación requiere muchas instrucciones directas y prácticas. Por ello es importante ser paciente y saber que tendrá que reforzar esas habilidades una y otra vez.
Conozca más acerca de cómo lucen las dificultades para captar las pistas sociales en los diferentes grados escolares. Lea cómo una mamá logró que su hijo dejara de interrumpir. Averigüe cómo la regla del “codo” puede ayudar a los niños a aprender a respetar el espacio personal durante las conversaciones.
Amanda Morín
Fuente: Understood